De acuerdo con estimaciones privadas, el BCRA acumuló una posición vendida en futuros de magnitud. Juan Manuel Truffa, economista de Outlier, calculó que llegó a unos USD 6.100 millones, mientras que Fernando Marull, de FMyA, la ubicó en torno a USD 6.300 millones.
Marull agregó que hoy vencían USD 1.200 millones correspondientes a los contratos de agosto y anticipó que mañana la posición neta vendida de la autoridad monetaria podría ser menor porque el BCRA no renovaría la totalidad de esos compromisos.
Significado la PGNME
La PGNME es un conjunto de normas mediante las cuales el Banco Central regula las tenencias de dólares y activos dolarizados de las entidades financieras. El organismo fija un límite a cuán comprados o vendidos pueden estar los bancos en el mercado de contado y en el de futuros. Así restringe su capacidad de operar y busca que no se conviertan en actores relevantes en eventuales corridas contra el peso.
Con la Comunicación A 8311, el Central reforzó esa línea de control. La regulación se aplicó de manera sorpresiva en el último día del mes, cuando se definía el precio de referencia para los contratos de futuros. Según especialistas, la intención fue evitar que los bancos vuelquen ganancias acumuladas en derivados sobre el mercado spot en un único movimiento que pudiera alterar la cotización.
Cambio con la Comunicación A 8311
Expertos explicaron que la comunicación introdujo dos modificaciones principales. La primera, con entrada en vigencia en diciembre, transforma el cálculo de la PGNME negativa, que hasta ahora se medía como un promedio mensual y pasará a verificarse a diario. La segunda, vigente desde hoy, prohíbe que los bancos aumenten su posición spot positiva en el último día hábil del mes. Sí se les permite reducirla. Al hacer esto, los bancos no pueden hacer grandes cambios en sus tenencias en moneda extranjera y generar así movimientos abruptos de oferta o demanda.
Es importante subrayar que la norma no alteró el tope de la PGNME: los bancos mantienen la misma capacidad de tenencia en dólares. El cambio radicó en la frecuencia de control y en la limitación específica para la jornada de cierre.
La explicación técnica de Truffa apuntó a la lógica de esta decisión. “A lo que apunta la circular es que como los bancos siempre tenían un poco de hueco para seguir comprando spot el último día, y el último día es el fixing de fin de mes, ahora lo que les dice es el último día no podés comprar. Lo único por eso se ven, porque te comparo con la PGM del día anterior. Entonces, durante el mes comprá comprá de acuerdo a la posición que podés, está todo bien, pero el último día del mes no me vas a presionar el tipo de cambio, porque como venía el fixing y se guardaba en lugar para comprar más spot, se lo querían comprar todo a fin de mes. Después lo escupían al día siguiente, ponele, pero de esta manera no lo pueden hacer más”, afirmó.
Recientes intervenciones
En las últimas semanas trascendió que el Banco Central había desplegado su intervención en futuros más elevada en tres años durante julio. El organismo incrementó de forma significativa su posición vendida y logró frenar la escalada cambiaria tras el fin de las LEFI. Esa operatoria coincidió con el avance del 14% del dólar en ese mes y la necesidad de utilizar instrumentos alternativos para mantener el precio bajo control. (Infobae)